El presidente de Semes dice que Sanidad ofertará «200 plazas MIR o menos» de Urgencias y pide una planificación para asegurar el relevo generacional venidero.
La Sociedad Española de Médicos de Urgencias y Emergencias (Semes) está celebrando en Murcia su congreso nacional. Un encuentro especial, ya que cada vez está más cerca que la especialidad sea una realidad completa, con la publicación del programa oficial y la aprobación de las primeras plazas MIR.
Durante la reunión en Murcia, los urgenciólogos integrantes de Semes eligen a su nuevo presidente. Pero no habrá sorpresas, ya que Tato Vázquez seguirá al frente de la entidad después de que no se haya presentado alternativa alguna a su candidatura. «Le di bastantes vueltas porque el trabajo en este tiempo ha sido muy duro», confiesa. Lo que sí habrá es votación, telemática, pues él mismo ha insistido en que quiere conocer el respaldo y no ser proclamado directamente sin conocer ese dato.
Según explica, a lo largo del mandato que inicia, la sociedad emprenderá un cambio de sus estatutos para «europeizar la sociedad», dice. Eso implica que se cambiará el sistema de elección y «dentro de dos años ya elegiremos -apunta- al futuro presidente, al futuro secretario general y al futuro tesorero. Es decir, las finanzas, la administración y la presidencia. Así será en el próximo congreso que celebraremos dentro de dos años».
Otras de las reformas que llevaran a cabo en este tiempo es que «las vicepresidencias de médicos, de enfermería y de técnicos pasen a elegirse por las distintas secciones; por sus socios», explica.
Uno de los grandes logros de estos dos últimos años ha sido que el Ministerio de Sanidad haya aprobado por fin, y después de casi 30 años de reclamación, la creación de la especialidad. El programa de formación oficial, con los dos primeros años comunes con Medicina Familiar y Comunitaria, está pendiente de salir a audiencia e información pública para, posteriormente ser aprobado y publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Vázquez señala que «el programa está y los criterios de acreditación de las unidades docentes también están listos. Solo faltan los trámites administrativos. Mi expectativa -dice- es que las primeras plazas MIR estén ofertadas en la convocatoria del año próximo, en 2026. Es decir, que la especialidad pueda ser elegida ya por los futuros residentes».
Con unos tiempos tan ajustados, el presidente de Semes cree que si el programa aún no está aprobado, la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud, que hace su propuesta de plazas de formación especializada antes de verano y después es aprobada por el ministerio, «trabajará con una estimación de plazas aproximada a la espera de la publicación definitiva del programa. Nosotros -explica- tenemos una expectativa de puestos para el recambio generacional futuro, pero entendemos que en 2026 no podemos salir con todas las plazas que necesitaríamos; estoy seguro de que serán bastantes menos».
Su propuesta inicial es que sean entre 250 y 300 puestos de formación en esa primera convocatoria, «pero creo -confiesa- que el ministerio está sobre unas 200 o quizás un poco menos».
Vázquez defiende que, más allá de esta primera convocatoria MIR en la que haya plazas de Urgencias, «es necesario sentarse y planificar las que se van a necesitar en el futuro. Ya hemos dicho muchas veces que deberían ser entre 500 y 600 anuales. Y no lo digo por capricho».
El presidente de Semes cita el Informe de necesidad de médicos especialistas en España 2023-2035, del Ministerio de Sanidad, donde la especialidad de Urgencias (aún pendiente cuando se realizó dicho informe) «aparece con un déficit de un 10%, es decir, un déficit moderado desde 2029 hasta 2035″ y será una de las más envejecidas. Eso solo se arregla de una manera y es con más MIR que aseguren el relevo generacional».
Los post-95 y el acceso extraordinario al título
Vázquez analiza también la sentencia del Tribunal Supremo que ha dado la razón al Colegio de Médicos de Madrid en su demanda sobre la discriminación de los titulados después de 1995 que no tienen especialidad y a los que el real decreto que crea la especialidad de Urgencias y Emergencia deja fuera del proceso extraordinario para obtener la titulación.
Sobre este asunto, el presidente de Semes recuerda la posición que, dice, han defendido siempre «y es que la reclamación de los post 95 era muy lícita porque muchos de ellos llevan trabajando en este ámbito muchos años. Lo que no entendimos -aclara- era la suspensión cautelar del proceso; no puedes castigar a todo un colectivo. Que el Supremo dicte lo que tenga que dictar y el ministerio, después, tome la decisión que sea teniendo en cuenta ese fallo».
Pero Vázquez va más allá en su análisis y valoración de la sentencia del Tribunal Supremo y cree que «hay que estudiar las consecuencias de esa sentencia, porque es un problema que no solo afecta a Urgencias, afecta a todas las especialidades».
Y es que el 1 de enero de 1995 supuso un punto de inflexión para el ejercicio de la medicina general en el ámbito público. Antes de esa fecha, los licenciados en Medicina podían ejercer en el sistema público a través de la especialidad de Medicina de Familia (vía MIR) o bien a través de una habilitación especial. Pero a partir de enero de 1995, solo pueden ejercer en el sistema sanitario público, a través de la especialidad, ya no hay habilitación en el caso de Medicina Familiar y Comunitaria.
El presidente de Semes recuerda que, a pesar de esa norma, los distintos servicios de salud han estado contratando a profesionales, tanto en atención primaria como en especializada, que o bien no tenían la especialidad de Medicina Familiar en el primer caso o no homologada su formación en el segundo.
Esa segunda situación sí podría afectar a más especialidades, pero no la primera, ya que en el caso de Urgencias el decreto que crea la especialidad sí contempla un proceso extraordinario de titulación del que las demás especialidades no disponen.
De cualquier modo, cree que la sentencia del Supremo puede ser un aviso a navegantes y que «el Consejo Interterritorial y el Ministerio de Sanidad deberían analizar lo que supone para el sistema MIR y qué puede pasar con el resto del SNS».
***Entrevista publicada en Diario Médico el 6 de junio de 2025.