El punto P es el equivalente masculino del punto G. Es una zona situada en la próstata y caracterizada por una alta concentración de terminaciones nerviosas que la convierten en un área potencialmente erógena.
El punto P se encuentra a unos cinco centímetros del ano en la pared del recto anterior.
Según la psicóloga y sexóloga Ángela Aznárez, el punto P es la región de la próstata que, al ser estimulada de manera adecuada, puede generar una sensación placentera intensa, incluso capaz de provocar un orgasmo distinto al tradicional, conocido como orgasmo prostático.